Soñé
que tú me llevabas
por una blanca vereda,
en medio del campo verde,
hacia el azul de las sierras,
hacia los montes azules,
una mañana serena.
por una blanca vereda,
en medio del campo verde,
hacia el azul de las sierras,
hacia los montes azules,
una mañana serena.
Sentí
tu mano en la mía,
tu mano de compañera,
tu voz de niña en mi oído
como una campana nueva,
como una campana virgen
de un alba de primavera.
tu mano de compañera,
tu voz de niña en mi oído
como una campana nueva,
como una campana virgen
de un alba de primavera.
¡Eran tu voz y tu mano,
en sueño, tan verdaderas!...
Vive, esperanza, ¡quién sabe
lo que se traga la tierra!
Antonio Machado
Quin plaer somiar coses boniques!!!
ResponEliminaDe vegades el trist és despertar...
EliminaUn dels més grans!
ResponEliminaN'estic convençuda, Xavier, és dels millors.
EliminaPreciós, m'encanta Antonio Machado...
ResponEliminaPetonets.
Són uns poemes tan humans, tan senzills i amb tanta sensibilitat, arriben al cor.
EliminaPetonets!
Quant que m'agrada en Machado !!
ResponEliminai la foto es divina
petons
Genial, poeta!
EliminaLa foto és la silueta de la parella que hi ha al mirador de los Cuatro Vientos, a Sòria.
Petons, bonica.